Ansiedad por separación

¿Alguna vez has sentido ansiedad, miedo, angustia o taquicardias? Seguramente no has sentido que tuvieras mucho control sobre la situación y has hecho lo que has podido para sobreponerte.

No era una situación que desearas ni te habría ayudado que alguien te gritase o regañase en ese momento.

Pues a los animales les sucede lo mismo. Su ansiedad se desencadena por una emoción que no pueden controlar y hacen lo que pueden para sobrellevarla.

Aunque suele estar más vinculada a los perros, también la sufren mucho los gatos, y vamos a hablar de ella desde el punto de vista de la comunicación.

En perros se manifiesta como estrés, micciones en casa, romper cosas, llorar, ladrar… En el caso de los gatos que han estado todo el día solos, durmiendo y muy aburridos, empiezan a jugar como locos cuando el responsable llega y se pasan la noche maullando para soltar la ansiedad.

Sea el animal que sea y la reacción que tenga, te puedo asegurar que regañarles no sirve de nada. Es muy difícil estar cada día 8, 12, 14 horas solos en una casa sin apenas salir, haciendo un paseo corto por la mañana porque vamos con prisa o sin tiempo que dedicarles, llegando por la tarde cansados, haciendo otro paseo corto…

Ellos gestionan como pueden con su situación y lo que sienten. Recuerda que su comportamiento es la forma en la que se comunican contigo y te dicen qué les pasa.

QUÉ LO ORIGINA

La ansiedad por separación no siempre viene de que los animales piensen que les van a abandonar. También ocurre muy a menudo que no saben estar solos en casa. Hay animales muy nerviosos que siempre están pendientes del responsable y siempre esperan que les marquen una directriz, que están completamente centrados en la persona y no tienen autonomía o una buena autoestima. En estos casos les viene muy bien el refuerzo mediante rutinas para que ellos tengan muy claro qué va a pasar.

También sucede en perros con una actividad mental y física muy alta que no están teniendo el nivel de actividad que necesitan.

El espectro de razones por las que un animal siente ansiedad es muy amplio, y por eso tenemos que saber la causa real en cada caso.

Recuerdo una comunicación con una perrita que me contaba que su responsable salía mucho por las noches y volvía en muy malas condiciones. Ella se quedaba toda la noche aullando por la preocupación que sentía al no saber cómo iba a volver esta chica a casa.

MI ENFOQUE DESDE LA COMUNICACIÓN

En la consulta me piden a menudo que le diga al animal que no ladre o no llore por los vecinos, pero yo nunca lo enfoco así. Lo primero que hago es entender al animal y pedirle toda la información necesaria.

Normalmente un animal siente ansiedad por varias razones a la vez. Por ejemplo, si le abandonaron en el pasado o le dejaron muchas horas solo en casa o en un balcón, sentirá miedo sumado a una sensación de no saber estar solo.

Muchas veces la ansiedad por separación es un saco en el que se meten diferentes problemas y se marcan las mismas pautas para todos. Si no hemos acertado primero con el problema, esas pautas no le van a servir ni van a tener un efecto en el animal.

CÓMO AYUDA LA COMUNICACIÓN

Las personas somos muy dadas a adelantarnos a lo que pueda pasar, especialmente si nos preocupa. Antes de salir de casa ya estamos pensando en todo lo que puede pasar cuando el animal se quede solo y generamos un estado de estrés que el animal percibe. Si hacemos esto cada vez, podemos estar creando un detonante, generando una emoción de ansiedad que él siente y después manifiesta.

Acudir a un Comunicador profesional nos da una perspectiva externa que es muy enriquecedora, pero para mí la clave está en aprender a comunicarnos con nuestros animales y darles la oportunidad de expresarse cada día. De esta forma podemos bajar sus niveles de ansiedad y estrés, aportarles calma, y saber qué les pasa o qué necesitan.

Una cosa que funciona muy bien es explicarles que vamos a salir, decirles cuánto tiempo más o menos y por qué no pueden venir. El mensaje, como te explico aquí, debe ser coherente. Si le explico que puede estar tranquilo, debo conectarme yo con ese sentimiento de calma y transmitírselo.

El tiempo es relativo. Un mismo espacio de tiempo se me hace corto o largo dependiendo de la emoción que sienta. Media hora esperando a que me atiendan se me puede hacer eterno, pero media hora con unos amigos pasa volando. Si el animal siente mucha angustia, no le va a ayudar que le digamos que es poco tiempo, pero le podemos dar una referencia más clara, como que volvemos antes de que anochezca o de nuestra hora de la comida.

QUÉ HAGO SI MI ANIMAL TIENE ANSIEDAD POR SEPARACIÓN

La forma más efectiva de solucionar el problema es acudiendo por un lado a la figura del comunicador animal para conocer el problema y saber qué siente y necesita. Para los animales puede llegar a ser desesperante que intentemos solucionarlo de muchas formas y no lleguemos a ver el problema de raíz. La comunicación nos da esa información desde el principio y nos evita dar pasos en falso.

Por otro lado, acudir a un etólogo o entrenador en positivo que además de trabajar con el animal, nos va a dar pautas para nuestra propia gestión emocional.

Y además podemos complementar con Flores de Bach, Reiki y otras terapias que ayudarán a potenciar todo lo demás.

Si desde el principio damos los pasos adecuados, nos evitamos mucho tiempo y sufrimiento. Y cada paso que demos será acertado.

En conclusión, no le puedo pedir a un animal que está muchas horas solo en casa que esté tranquilo cuando me vaya y cuando vuelva. Necesitan compañía, movimiento, actividad, seguridad… Si tienen ansiedad por separación, es porque les falta algo importante que tenemos que darles para que estén emocionalmente sanos, se sientan a salvo y sean lo más felices posible.

– Clara Martín, Comunicadora animal, terapeuta y formadora.

En el vídeo Ansiedad por separación hablamos más sobre este tema y respondo a  preguntas en directo.

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